sábado, 15 de diciembre de 2012

martes, 11 de septiembre de 2012

Mix de escritos

Tumbada en un sofá oliendo los efluvios de una ciudad inexistente.
Las campañas retumbaban por toda la ciudad como si se tratara de un gran bullicio de gente enfurecida.
El cielo se volvió oscuro, como si fuera la noche del fin del mundo. En una calle de las afueras de la ciudad una mujer se convertía en algo extraño y seguía a un hombre por detrás...hasta que lo alcanzó y se lo comió!


Cuando la luna está llena
en el rincón de ensueño te espera,
el amable caballero con su bella cabellera
observando el paisaje ensimismado
mirando un triste olivo que de la nada a surgío
con una lenta melodía
y en perfecta sinfonía
una dama apareció
y el silencio se rompió
alegrándose su cara y también su corazón
a su lado se sentó
y la noche iluminó
sus miradas se cruzaron
y supieron que se amaron
en una vida pasada
se dijeron yo te amo.
Tras unas simples sonrisas
se creo un brusco silencio,
nadie se atrevía a romperlo
pero sus corazones murmuraron un te quiero.
Y allí en aquel viejo banco
se dieron su primer beso
Luego se marcharon dejando atrás sus nombres entrelazados
Creado por Sofía e Itziar 27-03-2010


Nunca sabemos lo que nos puede pasar es algo que se cierne a nuestro destino. No debemos luchar contra él, sino dejarlo llevar.
Lo menos insospechado, está a punto de pasar, es posible.
Un viaje a ninguna parte sin saber absolutamente nada de lo que va a ocurrir.

Yo era la sombra del hombre asesinado, 
por la armada mano primeriza; 
era la mancha de pulmón ceniza
y vivía volando en el cielo reflejado.
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Hubo un tiempo, en mi loca juventud, 
en que sospeché vagamente la verdad,
y que en el mundo, únicamente tú
me ocultabas que en la muerte esta la eternidad.

Poesia es la unión de dos palabras que uno nunca supuso que pudieran juntarse, y que forman algo asi como un misterio

Me gustaría que por una vez te parases a pensar en los viajes que desearías hacer.. Libera a tu mente de esa celda y viaja a los más recóditos parajes que nunca hubieras imaginado. Por la culpa de los nervios, el estrés o por el simple echo de no plantearte imaginar tus propios sueños.
Cuando viajas mentalmente, puedes hacer las acciones que tú desees en el momento que quieras, puedes ser libre, sin las ataduras en las que en la realidad te enfrentas.
Sé libre, por unos instantes, o durante horas...

En un mar de nieblas reconocí su silueta, me lancé corriendo hacia aquel espectro, cuando estaba a menos de dos metros me di cuenta de que era un espejismo, estaba tan obsesionada que ahora le veía estando despierta. Pasaban los días esperando que volvieras junto a mi. Reí, lloré y todavía no has vuelto, te echo de menos.

La puerta permanecía cerrada, su cuerpo, inmóvil, plácidamente recostado sobre el colchón. Me intenté imaginar lo que estaba soñando. Le imaginaba soñando con compases y melodías, navegando por notas y acordes, y no me equivocaba, era así, se le notaba en la mirada perdida, mirando a ninguna parte...

Lo maravilloso de las máquinas del tiempo, es que puedes viajar a cualquier época, conocer cómo pensaban las gentes. 
También puedes cambiar el futuro con un solo movimiento, a mejor o a peor...
Nos adentraremos en un mundo muy diferente al nuestro.

Desde el vacío de la sombra del corazón, mi alma innerte se desgarra en un mar de sombras, mi yo se muere y se deja morir con aquel silencio en el abismo del frío y mudo mundo.
Tú, sediento, solo e inerme, indefenso de ti mismo por miedo a hacer lo roto y a deshacer los hechos.

Como cada día, intento mejorar.
Es lo mejor para poder conseguir mi meta...
Cumplir con tus sueños es lo más importante en la vida, todas las personas soñamos.
Aunque sean sueños casi imposibles, de todas formas hay que luchar por ellos. Si te rindes, no podrás sentir la euforia que te evade todo tu cuerpo.

Las calles aún languidecían entre neblinas y serenos cuando salimos al portal Las farolas de las Ramblas dibujaban una avenida de vapor, parpadeando al tiempo que la ciudad se desperezaba y se desprendía de su disfraz de acuarela. Al llegar a la calle Arco del Teatro nos aventuramos camino del Raval bajo la arcada que prometía una bóveda de bruma azul. La claridad del amanecer se filtraba desde balcones y cornisas en soplos de luz sesgada que no llegaban a rozar el suelo.

Como si estubiera en trance
sin tomar cosas extrañas que alteren mi cuerpo
solo con el poder de la música
todo dejandose llevar
dejando que fluya por el espacio cerebral.

Siempre estuve pensando en cómo sería mi vida después de el cambio que iba a pasar, me la imaginé de todas las formas posibles, muchas de ellas horribles, pero lo que jamás hubiera imaginado es lo que me ocurriría, un sueño una realidad que superaba de lejos las cosas más increíbles que me podía imaginar, solamente con estar a su lado. Aún si cierro los ojos recuerdo aquellos atardeceres, tu rincón favorito de la ciudad que pronto se convirtió en nuestro rincón….. Pero por desgracia las cosas buenas no duran eternamente.

Caminabas con una elegancia sinigual...
Te esperaba apoyada en una farola de la calle, como siempre, admirándote... Me encantaba mirarte y tocar tu precioso pelo, mirarte a esos ojos castaños que se perdían por la habitación y se cerraban y abrían mientras te observaba en silencio... 

Volábamos a la deriva de nuestros sueños el destino me llevó a ti.

Recuerdos de una vida pasada: Las sombras se iban adueñando de tu cuerpo, poco a poco desaparecistes bajo su capa negra. Las luces de la ciudad despertaban sumidas en un sueño profundo, la luna se despedía para darle los buenos días al nuevo inquilino del cielo. Ya no se sabía nada de ti, hasta que leí aquel libro, no ponía tu nombre, pero sabía que hablaba de ti, te describía tal y como eras, con una exactitud asombrosa...

Horas, minutos, segundos perdidos en el tiempo... Tan solo un segundo puede cambiar tu destino, tu futuro y tu vida. No lo dejes escapar. Conquista todos y cada uno de los segundos que forman tu vida.

Las cadenas se le aferraban a sus tobillos, caminaba descalzo, desorientado.

El agua en reposo deja entrever la figura de tu cuerpo en la orilla, tú la observas y contemplas el movimiento de sus pequeñas olas...

Tú eras la luz de la cual emanaba el día
Yo era la sombra que acaparaba las noches...

Deja de cubrir tus ojos con esa venda,
solo quieres percibir lo perfecto del mundo
cuando todo es miseria y agonía.

La oscuridad de la casa
innunda todas las estancias
Enciendes la suave luz de una vela
que nos alumbra en la penumbra
Nuestros cuerpos recrean sombra

Misterioso poema al destino

Tu eres aquello que cree ser.
Si crees ser algo que perecerá
entonces eres aquel que perecerá.
Y probablemente
en el enfrentamiento con la muerte
no puedas sobrevivir

Enciende el viejo transistor
sintoniza la frecuencia
de nuestros corazones 
sonando al unísono.

Caminar en silencio
viviendo de ensoñaciones
no hacen falta palabras
para expresar lo que siento.
Con solo perderme en tus ojos, 
ya sabes lo que quiero.
Indecisión,
a la hora de tomar el camino correcto.
Miedo, 
a perderte entre la gente.
Suspiros perdidos en la caricia del viento.
Una sonrisa impresa en mi cara, 
no puedo evitar ocultarla.
Todo cuanto pasa a mi lado
es ajeno a nuestras miradas.

Todo se convierte en un sin-vivir...
A tu lado, misterios,
ideas inacabadas
que no expresan nada.
Sentimientos que desean florecer 
cual flor de hiel.
Pero soñándolas se dejan ver.
Cuando a tu mente me acerco
esas ensoñaciones se van
para dar paso al deseo.

Echa barcos a la mar
navegan libres 
cual mariposa 
en el cielo azul
de la mañana.
Corrientes de agua
lo acercan a la costa,
se deja mecer por ellas.

Oscuridad, soledad
¡que importa!
Desapareces en la nada
como un fantasma.
Quiero oírte,
no te vayas de mi lado.

Efímera luz del día,
atardece en tus pupilas

Heridas en el alma,
heridas en el corazón.
Mas, qué importa!
¿Quién soy yo?

vacío como un folio en blanco
esperando que derramen sobre él
tinta líquida, que da forma
a sentimientos inacabados

Se corrompe mi alma
mi corazón hecho pedazos.
Retorna a mi la soledad 
de la que una vez escapamos.

Escalofríos que recorren mi cuerpo tras las caricias de tus manos en mi cuerpo.

Ilusiones que se pierden en tus ojos, tu forma de ser es cambiante y no entiendo el por qué. Ya todo no es como antes.

Existiera una máquina del tiempo, que me pudiera descubrir el mundo si no hubiera existido . . . ¿Cómo sería?

Estamos cerca, solo a un paso de conseguirlo. 
Lo conseguiremos todos juntos

La música te hará olvidar
notas para allí 
notas para allá.
Problemas, millones
acordes van, 
acordes vienen.
Pero alguna vez tendrás que apagar el reproductor y parar la música. 
Chillos y más chillos
los silencias 
poniendo el altavoz.

Existe, de hecho, jueces, una ley no escrita sino innata. La cual no hemos aprendido, heredado, leído, sino que de la misma naturaleza la hemos agarrado, exprimido, apurado. Ley para la que no hemos sido educados, sino hechos, y en la que no hemos sido instruidos sino empapados

Para algunos, vivir es galopar un camino empedrado de horas, minutos y segundos. Yo más humilde soy y sólo quiero que la ola que surge en el último suspiro de un segundo, me transporte mecido hasta el siguiente.

Todo cuesta. Me desanimo al pensar lo mucho que me esforcé, y que para nada mereció la pena. Un traspiés, lo tiene cualquiera, pero llevo tantos, que al mínimo obstáculo pretendo encontrar algo más fácil que me lleve al mismo sitio. Y ese sendero, aún no lo he encontrado. Aún así, no me derrumbo, sigo adelante, tengo que seguir esforzándome, aunque me lleve la salud en ello, espero obtener alguna recompensa que me anime a seguir. 
Son muchas las caídas, pero seguiré levantándome hasta encontrar algo inesperado que me haga feliz.

Retumban las campanas de la Catedral. La ciudad enmudecía tras una espesa capa de niebla que no dejaba divisar ni a más de 1 metro de mis pies. El frío se metía en mi cuerpo, me rajaba la cara y me abría las entrañas.

La existencia. Cuán insignificante pedazo de carne somos, que no hacemos más que echar mierda los unos a los otros para pretender llevar razón. 
Putrefacción, placer. El cuerpo experimenta. Contracción de músculos. Parálisis del cerebro. Muerte. Putrefacción. Alimento para gusanos. Fin del ser.

Rasguño en el dedo. Sangre en el cuerpo. Inmovilidad.
Conciencia tranquila. Nada que pensar.
Devanecimiento. Leve caída.
Plaf!

Todo es una farsa. Pretenden ser unos dioses proponiendo y prometiendo a la gente que la cosa va a mejorar. Cuando tienen el poder, nada de eso ocurre. Nada mejora, e incluso puede ir hasta peor. ¡Pero no pasa nada! Ya se terminarán sus años de gobierno y subirá otro al mando, igual o peor

El viento me lamía la cara
su aliento gélido se me calaba en los huesos.
La luna iluminaba con su cara redonda la calle Mayor
y la niebla se divisaba en el interior de mi corazón.

Estepas sombrías
a la luz de la luna 
veo vuestras formas,
ininterrumpidas,
viajan hacia el infinito.
Luz de otoño
suavemente
iluminando el paisaje
y apartando al instante
el paisaje cubierto
de niebla

Hojas que esperan a ser pisadas. A los bordes de la desesperación porque el viento es un mal amigo y las obliga a irse de aquí.

Las nubes cual cortinas se descorrían de la barra infinita del cielo, y ella, tan blanca, iluminaba los pequeños luceros que formaban el planeta, pequeños puntos luminosos, miles de bombillas encendidas. 
Magia había en ese instante.

Estepas sombrías
a la luz de la luna
veo vuestras formas,
ininterrumpidas,
viajan hacia el infinito.
Luz de otoño
suavemente
iluminando el paisaje
y apartando al instante
el paisaje cubierto
de niebla.

El viento me lamía la cara
su aliento gélido se me calaba en los huesos.
La luna iluminaba con su cara redonda la calle Mayor
y la niebla se divisaba desde el interior de mi corazón.

Dantesco espectáculo
gente arrastrando su famélico cuerpo,
mientras estruendosos bombardeos
acallan sus sueños en un breve lapso de tiempo.
Mas el recuerdo no será enterrado
mientras su historia siga viva.

Series enteras de celuloide
que aluden al pasado
y hacen del recuerdo un arma
combatiendo así los engaños
de ambiciosas manos.

Atentados contra la libertad,
personas con ambiciones,
sueños, esperanzas y frustraciones
lustradas por la tiranía.

El agua es una inagotable fuente de recursos y de vida, en ella se puede descubrir un fascinante universo de seres extraordinarios. Algunos, sin que nos demos cuenta y que juegan un importante papel en la vida de nuestro Planeta...

En realidad no sé donde tengo mi mente cuando estoy cerca tuyo. Mis pensamientos se sumergen en tus ojos

Si lo sabes, no sé por qué no lo evitas. 
Sabes que la Luna te está esperando, ve con ella. Súbete a una estrella, rueda por el Universo

Que difícil es saber lo que hacer. 
Cada situación es distinta.
Cuando has hecho una cosa, después te pones a recapacitar y te preguntas: ¿Qué hubiese pasado si hubiera hecho otra cosa?

Echaré de menos los noventa. Pero quizá sea mejor vivir otra época. 
No quiero que te vayas, pero lo harás, te irás a otra dimensión en el tiempo.

Esperaba el tren de medianoche. En el andén ya no quedaba nadie, salvo la esperanza y yo

Estás tan dentro de mi corazón que me produces sudores fríos cuando te quedas a mi lado. Te admiro y envidio tu felicidad, y la que creas en la mayoría de las personas. No dejaremos de ser lo que somos, ¿verdad? solo dos minúsculas personas que habitan La Tierra, en busca de la felicidad. Uno lo consigue y el otro se conforma con buscarla y nunca encontrarla. Supongo que la vida es así, y no actúa de ninguna forma, solo las circustancias hacen de esta estancia en el Planeta sea algo verdaderamente emotivo y con sentido o algo deplorable y sin nada que te motive a continuar... En mi caso es más lo segundo, pero no quiero dejar de soñar como sería la vida junto a ti, solo soñar, porque hacerse realidad...

Tu cuerpo es fuego y yo soy cera, cuando te acercas me fundo. Como pasaba en aquel mito de la antigua Grecia: 'Dédalo e Ícaro'. 
Siempre lo tengo en mente, corro peligro de fundirme con tu calor. Pero, me gusta tanto el fuego que no se si podré resistirme...Ese contoneo de luz y calor, esa danza incesante e imnotizante que tiene una llama, el único problema que tiene es el viento, que juega con ella a su gusto, y la llama no puede parar, pero que hace que ella esté viva y siga su contoneo.

Parecía que teníamos el Mundo en nuestras manos, pero solo era un globo terráqueo. Se deslizó como una lagartija y se esfumó de tus manos, cayendo, como si de una cámara lenta se tratase a nuestros pies y haciéndose pedazos mientras tú gritabas: ¡TENÍAMOS EL MUNDO EN LAS MANOS, Y AHORA ESTÁ EN NUESTROS PIES! 
- Pero nuestras vidas no son eternas, y no viviremos siempre teniendo el Mundo en nuestras manos o a nuestros pies.- Te dije. 
- Tienes razón... 
La tristeza inundó su rostro, y fijó sus ojos en los míos, lo que me provocó que todo mi cuerpo se estremeciese.

Aún tengo la esperanza de que algún día todo esto cambiará a mejor. El mundo es un desastre en el que tenemos el control, pero a la vez somos esclavos de la naturaleza. ¿Qué hubiese pasado si no existiésemos? Probablemente no se acabaría la vida de los animales, plantas y demás tan pronto como lo hacemos nosotros, que hacemos que todo se extinga por nuestra mala conducta, por nuestros actos, y, poco a poco acabamos con nosotros mismos, o los unos con los otros.


jueves, 16 de agosto de 2012

El libro de historias

Es demasiado.
Solía decir aquel joven de pelo dorado.
Parecía un Dios salido de cualquier parte, con atuendos de gente normal y corriente.
Sus temblorosos dedos querían deslizarse por aquel pelo rizado que imitaba a las olas del mar cuando los rayos del sol se ven reflejados en ellas, pero se limitaron a coger un libro de tapas duras, y él se sentó a mi lado acurrucado en mis rodillas, esperando a que le leyera su libro favorito.
''CAPÍTULO UNO: Muchos años pasarían hasta que Tom se diese cuenta de los errores que había cometido en su vida.
El año 1950 estaba presente en el calendario, las oleadas de balas, tanques y bombas habían arrasado casi toda La Tierra. A mediados del mes de julio, Tom tenía sus esperadas vacaciones y no tenía nada mejor que hacer que pensar...
Siempre se ha dicho que cuando el hombre empieza a pensar comienzan los problemas, pues en este caso, también se cumplía.''
¿Sabes? - dijo el chico.- Yo también he cometido muchos errores, y uno de ellos, del que me arrepiento profundamente, ha sido no decirte que te quiero.

miércoles, 25 de julio de 2012

Va de un sueño


Todos íbamos a la playa por aquel entonces, pero ese año fue distinto, decidimos ir a la montaña.
Las primeras horas de autobús fueron agotadoras, por lo que mis ojos se cerraron de un sopetón.
Cuando desperté el autobús se había parado, todo el mundo estaba abajo almorzando, decidí continuar durmiendo...
Fue muy extraño, aun estando dormida, notaba como el sueño que estaba teniendo era de verdad. Un soplo de aire me despertó, miré a mi alrededor, me había quedado dormida encima de una rama de árbol, respiraba el olor fresco del monte... Pero, ¿qué hacía allí? ¡Era imposible que me hubiese quedado dormida encima de un tronco de árbol como por arte de magia! Fue entonces cuando me di cuenta de que estaba experimentando un cruce de sueños, que me intentaban engañar para que pensara que era la realidad.
Mi sueño continuó su curso. Me levanté del tronco y me encaminé hacia el albergue (donde suponía que estábamos hospedados). Allí estaban todos mis compañeros. El albergue estaba situado al pie de un monte con la cumbre nevada y la entrada daba a una carretera secundaria donde no pasaban demasiados coches. En lo alto de la montaña había una pequeña cabaña, rodeada de numerosos pinos.
Los primeros días fueron medianamente normales dentro de lo que cabe, por eso mi sueño pasó directamente a la acción, a lo importante.
No sé que día fue (ya que en los sueños no tiene sentido el paso del tiempo, aunque se hace una pequeña distinción entre el día y la noche, en resumen, se pueden distinguir las horas del día), estábamos todos en el albergue, en la sala común, ya que estaba nevando.
A causa de la nevada, las conexiones y la luz se dificultaron, todas las luces se extinguieron, por suerte, el segurata del albergue tenía una linterna. Entre todos logramos encender unas cuantas velas. La nevada hizo que no se pudiese casi salir al exterior.
Me quedé encerrada en una habitación con una chimenea, con mis cuatro amigos. Entró alguien desconocido, con barba y unos rasgos extraños que le hacían ser raro para la vista, nos avisó: ''corréis peligro''. Nos asustamos un poco, pero nos anunció que existían unas pequeñas bolitas y resulta que eran unas bombas, cuanto más pequeñas eran más poder destructivo tenían.
Acto seguido, el desconocido se escabulló, y nosotros empezamos a registrar toda la habitación en busca de la munición, estaban detrás de un armario, las cogí y las metí con cuidado en una bolsa.
Cayó la noche, y los ruidos de las afueras del albergue comenzaron su aparición, helándonos la sangre y obligándonos a escondernos bajo la multitud de sábanas y mantas que cubrían nuestras camas, mientras, urdíamos un plan para tener todo bajo control y no sufrir ningún peligro.
Apagamos las luces, nos hicimos los dormidos. Una rama de un árbol cercano arañaba la ventana, emitiendo un desagradable chillido, le acompañó el sonido de unos pasos sobre el suelo de madera del pasillo. Estábamos preparados. La puerta cedió ligeramente, de las sombras del pasillo surgió un cuerpo fornido y otro a su lado más menguado, ambos entraron en la habitación. Los extraños encendieron unos candelabros que iluminaban con luz amarillenta la estancia.
El hombre corpulento le preguntó al otro: - Oye, ¿estás seguro de que está en esta habitación?
A lo que le respondió: - Si, tío, el jefe lo dejó bien claro, la habitación del fondo del pasillo de la derecha.
La respuesta pareció convencerle. Continuaron su búsqueda, hasta que oímos al hombre delgaducho reír a carcajadas, parecía que había encontrado lo que buscaba. Eric efectuó la 'señal' correspondiente para que todos nos levantáramos de la cama y apresáramos a los delincuentes, Jake y José lidiaron con el hombre corpulento y Ben, con el hombre delgaducho, mientras Eric y yo cogíamos lo necesario para atarles y amordazarles. Lo conseguimos aunque ofrecieron algo de resistencia. Les teníamos ya apresados y rebuscamos en los bolsillos de ambos, encontrando una pipa, nos miramos y pusimos todos la misma cara de extrañeza.
Mientras pensábamos para qué podía servir, el hombre corpulento hizo un pequeño movimiento, y de repente irrumpieron en la habitación unas personas vestidas enteramente de negro. Mis amigos y yo nos escondimos tras las camas.
Entonces dije a mis compañeros gritando: ¡¡Apartaos!!
Fue en ese momento cuando la adrenalina hizo mella en mi, y comencé a tirar las pequeñas bombas que iban dejando aturdidos a las personas de negro. Les dije: Corred, salid afuera, irán a buscar lo que quieren. Salí tras ellos, y cerré la puerta tras de mi.
Nos dispersamos alrededor del recibidor del albergue, para realizar la emboscada. Como preveía, salieron con cuidado e intentando no hacer ruido para poder percibir cualquier ápice de ruido y movimiento.
Cuando estaban lo suficientemente cerca de nosotros, lanzamos unas cuantas bolitas que explotaron al instante de tocarles los pies a aquellos extraños, todos cayeron rendidos, y, por el ruido que se produjo, los monitores salieron a ver que pasaba. Intentamos explicárselo a nuestro tutor, pero parecía no entender nada. Los demás monitores fueron a por cuerdas y ataron a los sospechosos.
Bajando desde la cabaña, se acercaba con patines una especie de sombra negra, que se volvía de color con la aproximación del individuo. Era el señor que nos avisó del peligro.
''Creo que tenéis algo que me pertenece.''-dijo mirándonos a los ojos a todos y cada uno de nosotros.
Le tendí la pipa, y le pregunté: ''¿por qué nosotros?''
El señor había desaparecido, nada más supimos de aquella historia.
El sueño comenzó a emborronarse y las voces se oían ya lejanas, desperté, angustiada.

sábado, 23 de junio de 2012

Poemario


Las nubes cual cortinas, se descorrían 
de la barra infinita del cielo, y ella, 
tan blanca, iluminaba los pequeños 
luceros que formaban el planeta, 
pequeños puntos luminosos, miles de 
bombillas encendidas.



Estepas sombrías
a la luz de la luna
veo vuestras formas,
ininterrumpidas,
viajan hacia el infinito.
Luz de otoño
suavemente
iluminando el paisaje
y apartando al instante
el paisaje cubierto
de niebla.



El viento me lamía la cara
su aliento gélido se me calaba en los huesos.
La luna iluminaba con su cara redonda la calle Mayor
y la niebla se divisaba desde el interior de mi corazón.



Dantesco espectáculo
gente arrastrando su famélico cuerpo,
mientras estruendosos bombardeos
acallan sus sueños en un breve lapso de tiempo.
Mas el recuerdo no será enterrado
mientras su historia siga viva.



Series enteras de celuloide
que aluden al pasado
y hacen del recuerdo un arma
combatiendo así los engaños
de ambiciosas manos.



Atentados contra la libertad,
personas con ambiciones,
sueños, esperanzas y frustraciones
lustradas por la tiranía.